Mareas de Otakus

No os podéis imaginar la ilusión que me hizo andar entre las filas de mesas del festival del comic de verano de Tokyo. Yo no soy muy otaku, soy lo justo^^, lo justo y equilibrado para ser feliz. Quiero decir, que no llevo ninguna de estas expresiones a la máxima expresión, simplemente cojo lo que me gusta y desecho lo que no me gusta tanto. Pero la verdad es que entre los muros de aquel evento me sentí uno mas, me sentí dentro de esa gran marea humana que se desplazaba lentamente por aquel recinto, sin complejos, sin pretensiones, simplemente disfrutando. Aquel fue el día mas freke de mi existencia.



Si os gusta el manga o simplemente no cerráis los ojos al mundo y sabéis disfrutar de las peculiaridades y extrañezas que este nos ofrece no podéis pasar una vida entera y no visitar alguna vez este festival. Tiene muy mala fama, suena mal al oído, ver tanta gente junta, tanta gente rara junta comprando perversiones con una sonrisa en los labios y derrochando sudor y entusiasmo a partes iguales...Bueno, digamos que meterse entre tanta gente con un calor infernal no es una de las mejores experiencias vitales posibles, al menos a priori. Pero la verdad, la pura verdad, es que desde el momento que te atrapa la marea de gente, algo en ti despierta, la ilusión, la increíble experiencia de estar rodeado de tanta gente, la sensación extraña de forma parte de un evento tan descomunal es simplemente....Increíble. Voy a relataros lo que vi, aunque lo mejor que podéis hacer, si podéis, es vivirlo por vosotros mismos.



La aventura empezó en las practicamente solitarios calles del sector mas industrial de Odaiba. Teníamos que andar un rato desde el Sega Polis hasta nuestro destino en el famoso pabellón donde se celebraba el evento otaku cada verano (e invierno^^). En ese camino nuestro guia y amigo, Razi, nos explico con una breve descripción como catalogar e identificar a un frekazo. Es fácil, existen tres rasgos característico de un frekazo nippon. Primero: Gafas. Segundo: Camisa a Cuadros. Tercero: Mochila colegial a la espalda. Todos reímos mientras nos lo contaba, pero es que sorprendentemente el siguiente tío con el que nos cruzamos cumplía con la descripción al detalle. Llevaba camisa a cuadros, gafas y su mochila al hombro en la que sobresalia algún que otro poster adquirido. Increíble. Eran tal y como Razi los describía!! El caso es que su nivel de frekesmo (esto ya es cosecha nuestra) se puede ver en el número de los tres complementos que posea. Es decir, un tío con Gafas es menos freke que un tío con Gafas pero con mochila a la espalda y este, es menos freke que uno que leve además la típica camisa a cuadros.^^ Cuando vayáis, si vais alguna vez, figaros y catalogad a los frekes con el nivelometro by Razi-sensei.



Poco a poco los frekes aumentaban en numero. El goteo de gente se convirtió en marea humana y allí estábamos nosotros dirigiéndonos hacía ese gran pabellón que habíamos visto en reportajes y en algún que otro Anime. Estábamos en camino, rodeados de gente y cada vez mas cerca. Nuestro corazón latía con mas y mas fuerza y nuestras cámaras hacían fotos a todo y todos expectantes de lo que nos íbamos a encontrar. Pero antes de entrar, teníamos que abituallarnos. Así que fuimos a una combini a los pies del pabellón. Allí guardamos rigurosa cola y compramos agua y comida para la aventura. Lo sorprendente, era que alrededor de la tienda yacían sentados en el suelo y exaustos miles de frikicillos, con su indumentaria, cargados con bolsas enormes cargadas de comic y poster comprados en el evento. Hablaban felices y comentaban con sus amigos frekes las compras del día. Increíble ver a esa marea de cansados otakus comentando las capturas del día. A la pregunta, es como aparece en los Anime/manga/series/documentales de exagerado. La respuesta: Si.^^

La marea cada vez se fue haciendo mas densa y cada vez menos fluida. Como si de una autopista en hora punta se tratara había una corriente de gente que salia del evento y la nuestra que se adentraba en el mismo. Ya se empezaban a ver a los primeros disfrazados pero no podíamos hacer fotos porque estaba estrictamente prohibido hacer fotos fuera de las zonas indicadas^^. Así nos fuimos adentrando mas y mas hasta que finalmente llegamos al corazón del evento. Allí si que había mogollón de gente, mas de la que he visto en mi vida. Todos apelotonados, moviendonos muy muy lentamente e intentando sobrevivir como podíamos. Afortunadamente o no, aquel día era el especial para las chicas y estaba todo repleto de otakus monas y no tan monas que iban a hacer sus compras de mangas gays. Si, nos dimos un paseo por las mesas (por algunas porque aquello era inmenso) y solo vimos mangas de temática homosexual. Naruto dándole por....a Saske o viceversa. Los hermanos de Full Metal haciendo guarradillas con el alquimista del fuego. En fin, esas cosas. Las vendedoras se sentaban tras una mesa llena de mangas muy firmes y con bastante vergüenza nos miraban cuando pasábamos. Ciertamente un grupo tan numeroso de gaijin era algo raro en aquel evento, no encajábamos muy bien. Finalmente huimos de los manga homosexuales femeninos y nos dirigimos felizmente a la zona de cosplayers.

Pero eso os lo contare en otra entrada^^. Antes de entrar en la zona cosplayera, quería hablaros de algo que me sorprendió gratamente. Y es la gran cantidad de chicas otaku que participaban en el evento, practicamente 50% de los asistentes (evidentemente 99% en la zona donde vendían los comic de hombres dándose placer), lo cual me causo una grata impresión. Aquel anticuado estereotipo del freke masculino japones se escurrió rápidamente de mi cabeza. Al menos en cuanto a otakus serefiere Japón ha alcanzado la paridad (sin ayuda de Bibiana Aido). Y esto es bueno, para ellas y para los otakus masculinos. Siempre he asociado el frikesmo o el otakismo con algo positiva. Con gente abierta y soñadora dispuesta a disfrutar a tope de sus sueños. Si la mujer japonesa a alcanzado estas metas estamos de enorabuena. Espero que el ejemplo se extienda como la pólvora. Por cierto, para los que buscan su amor otaku nippon, la mayoría de las chicas eran la mar de dulces y había muchos bellezones por ahí que quitaba el hipo y con la que seguro mucho soñarias con conocer. Animo, pues existen!!! Y ahora hablemos de cosplay. O no, por que esa...Esa es otra historia.