martes, 30 de noviembre de 2010

Los coletazos finales


El tiempo pasa muy deprisa cuando uno es feliz. Con estas mismas palabras redactaba hace apenas 4 meses una emotiva entrada. La primera que escribía tras mi regreso de Japón. Los recuerdos de aquel entonces aun están a carne viva. Muchas veces me encuentro de repente andando por Akihabara, recordando el sabor del katsudon o mirando con ternura las estrellas como si aun las viejas desde la azotea del hotel Edoya. En algunos momentos aquellas imagenes aun llenan mi memoria, regalando trazos de un pasado intenso y feliz.


Hoy quiero protagonizar este entrada con la siguiente frase: Que lento pasa el tiempo si vivimos en el pasado, simplemente no avanza. Este próximo Domingo me enfrento de nuevo al Nihon go no Ryokushiken Nivel 4. El año pasado aprobé el examen sobradamente y derrote a tan cruel enemigo como conté en el blog, pero ahora las cosas son diferentes. Esta vez no llego con la misma preparación que para el examen del año pasado. Además, mi rival es mas fuerte y encima es un rival completamente nuevo, pues este año han cambiado la metodología del examen. Esto puede ser una gran noticia o puede significar mi condena.


En cuanto a estudio, o preparación del temario, voy bastante bien. El problema es que no he hecho los ejercicios suficientes como para afrontar el examen con las garantias suficientes. Es decir, que me falta practica. Aunque es muy difícil practicar para un examen del que no existe practica alguna porque nadie sabe muy bien aun como va a ser. En fin, que todo puede pasar este domingo. Puede que todo vaya rodado y el próximo mes de Marzo este mas feliz que una lombriz o sumido en una pequeña decepción. Lo que mas me anima ahora mismo es que mi camino, para bien o para mal, del Noken 2010 esta apunto de terminar y eso significara una liberación.


El camino ha sido fatigoso y en algunos momentos a estado apunto de desbordarme, pero aquí estoy. He luchado contra las jornadas de estudio, las agotadoras praticas, las idas y venidas...Pero sobre todo he luchado contra la nostalgia, contra el dolor de la añoranza de aquella maravillosa que visite no hace mucho tiempo...He luchado por mantener unido mi corazón sabedor de que sus crónicas heridas no sanarían hasta que volviera a ver los arrozales del país sol naciente durante el aterrizaje del avión, que mis lágrimas de alegría no surcarian mis mejillas hasta que la fanta grapa volviera a deslizarse por mi paladar, que mi felicidad no volvería a ser completa hasta que mis manos aferraran las suyas para no dejarlas marchar jamas. Deseadme suerte, este domingo tenemos una batalla que ganar....os contare como me fue. Pero esa, esa sera otra historia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario