Cuando acabe el curso infernal de verano vivía en un mundo de felicidad y confianza en mi mismo. El japones era difícil, cierto, pero nada que no se pudiera superar con esfuerzo, trabajo y mucho mucho estudio. En mi ingenuidad no era consciente de la gran prueba a la que estaba a punto de enfrentarme en apenas unos meses. Y es que todo comenzó justo cuando acababa el curso de verano.
Paco-sensei nos informo en las últimas clases que en Septiembre podríamos matricularnos del siguiente curso intensivo que seguiría al que estábamos haciendo. Dicho curso, sería complementario del primero y servirá de formación suficiente para si queríamos presentarnos al examen internacional de lengua japonesa. Su nombre, en ese momento, no nos sonó a nada. Pero ahora se ha convertido en nuestra obsesión, nuestro objetivo, el verdadero juez que probara nuestro nivel de lengua japonesa. Hablo del temido...NOKEN.
Recuerdo que los primeros días del curso de Septiembre, rellenábamos los datos del examen con temor y miedo en nuestros corazones. Y es que el entrenamiento que íbamos a emprender era de una dureza y sacrificio extremos. Emprendíamos entonces un curso de 90 horas en menos de 3 meses para poder presentarnos al Noken Nivel 4 que tendría lugar el primer fin de semana de Diciembre. Es decir, dos horas al día todos los días de 3 a 5. Una autentica paliza. No solo había que estudiar, ahora en serio, un montón de kanji y vocabulario, sino algo para lo que ninguno estábamos preparado. El temido Listening!.
El Noken se divide en 3 partes. Una de Kanji/Vocabulario en la que hay ejercicios bastante facilitos. Los primeros son de elegir el kanji correcto entre 4, ya sea poniéndotelo en Hiragana y eligiendo el kanji o bien te dan el kanji y tienes que elegir de 4 opciones como se lee correctamente. La segunda tanda de preguntas era elegir la palabra correcta de una opción de 4. Bastante fácil con un poco de vocabulario. Y por ultimo elegir de 4 frases la que quiere decir lo mismo que la que te exponen en el enunciado. Fácil también.
La segunda parte del Noken es la gramática. Elegir la partícula correcta, la forma verbal correcta, adjetivos, etc. Posteriormente tenías que elegir la frase mas acertada para responder a una pregunta. Y por ultimo nos ponían unos cuentos textos infernales y nos hacían preguntas sobre ellos. Esta parte era más difícil que la otra pero a base de hacer examenes la afrontamos con garantías.
Pero la tercera parte se convirtió en nuestra peor pesadilla. Bueno, por lo menos la mía particularmente. Se trataba de la prueba de escucha. Que constaba de dos partes, una de dibujitos donde escuchábamos una conversación y teníamos que elegir en los dibujitos la opción correcta. Y otra parte en la que no había ni dibujos ni na, ellos decían las posibles 4 respuestas y tu tenias que elegir la correcta. Así que durante dos meses pasamos escuchando una y otra vez las escuchas de los años anteriores, no solo en clase, sino cuando andábamos por la calle, dormíamos, comíamos o hacíamos cualquier tipo de cosas. Tal es así que muchos diálogos acabamos recordándolos de memorieta.
Finalmente, tras meses de esfuerzo y muchos nervios, llegamos al examen. Toda la clase, encabezados por Paco-sensei y acompañados por compañeros de otros niveles, nos embarcamos en un bus rumbo a Barcelona para examinarnos. La primera noche fue muy divertida, ya que nos fuimos todos por Barcelona y acabamos comiendo rica comida japonesa en un restaurante de la ciudad condal. Como digo fue una noche divertida e increíblemente memorable.
A día siguiente llegaría el examen. El temido NOKEN. Como esto se me esta alargando mucho lo dejare para otra entrada. Solo diré que fue la prueba mas intensa y emocionante que he hecho en mi vida. Puede que exagere un poco pero...Esa es otra historia.
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