Pensamientos del cansancio

Mi último, o casi último encuentro de en mi carrera con los caballos ha ocurrido esta semana. Largas horas, desde el Martes hasta hoy, tratando diversos temas de esta peculiar especie. Después de estudiarlo durante años y de repasar de una u otra formas las múltiples patologías de esta especie, he llegado a confirmar, una y otra vez la misma conclusión. Y es que los caballos, para bien o para mal, están mal hechos. Tal y como decía una de las profesoras, los potros son muy débiles, no se pueden ni tocar, pero es que los adultos también son muy muy frágiles. No es un especial odio contra los caballos, especie bella, a su manera, como todas las demás. Pero es por esta multitud de patologías que sea tremendamente complicado el estudio de las mismas y de ahí lso quebraderos de cabeza durante todos estos largos años que parece ser, por fin han llegado a su fin.

Esta semana pues, ha sido especialmente dura, largas horas de prácticas, sumadas a las clases normales y las clases de japones. Todo esto junto, unido a los madrugones y a los no parar ni un momento han mermado sobremanera sobre mi forma física y mi condición mental. El cansancio ha sido una losa que no ha dejado de crecer en estos días, aprisionando mi estima y mi paciencia poco a poco, hasta que finalmente hoy no he podido mas y me resignado a cerrar la boca y soportar con estoicismo la jornada de hoy con el ceño fruncido y el mal genio apegado a mis ojos.

Esta semana espero que quede pronto en el olvido, espero pasar pagina rápido y ocuparme de cualquier otra cosa que este por venir. De momento, para relajarme un poco, me he echado una buena siesta. Después de dos horas de sueño reparador, tras despertarme del letargo, he mirado la oscuridad de mi cuarto y entonces me ha venido a la cabeza la tragedia, una tragedia que esta en boca de actualidad de los manipuladores medios, a causa de su triste primer aniversario. Y pese a su fragilidad, pese a la fatalidad, pese a todos los males, parece que Japón, de alguna forma esta saliendo adelante, esta logrando recuperarse poco a poco.

Estos días muchos serán los medios que harán demagogia, que jugaran con la gente recordando las mujeres mas brutales, los hechos mas llamativos, los cadáveres y la muerte servida en tacitas de pocos escrúpulos. Todo al servicio de la difamación, todo al servicio del espectáculo, todo al servicio de los necios. Por eso estos días os recomiendo no ver los informativos, al menos no con intención crítica, os invito a apartaros un momento, pensar en todas las imágenes que tenéis en vuestra mente de esta horrible tragedia y a vuestra manera, hagáis su merecido homenaje a los miles de personas que perdieron la vida justamente hace un año. Al y al cabo, esta semana fue muy dura, pero la del año pasado por estas fechas fue simple y llanamente para todos una autentica pesadilla. Una pesadilla que aun aquí, tan lejos, deja sus secuelas, pero esa, esa es otra historia.