Pese a todo

Bueno, al fin terminé el maldito examen. Ese que me trajo tan ocupado durante las últimas semanas. El resultado final lo sabré el martes pero de momento no son especialmente buenas. Los últimos días de estudio estuve muy disperso y solo podía vaguear y hacer el tonto sin dedicarle muchas horas al estudio. El problema era que aunque se las dedicara mi cabeza parecía estar en otra parte, y como un niño malcriado que no quería comer, se negaba una y otra vez a asimilar toda la información. "¿Para que?" me decía "¿Con que fin?. Lo cierto es que la resaca del último viaje comencé a sentirla y padecerla en el momento en que me vino de frente la monotonía, el cansancio y el trabajo duro. Así que los últimos días prácticamente no pude concentrarme ni hacer mucho de provecho.

Al fin me presenté y el examen salio lógicamente regular. Pero bueno, cabía de esperar, aunque aun hay esperanzas de que pueda aprobar, con un pelin de suerte. Si no es así, creo que me quedare prácticamente a las puertas del mismo. Pero eso sera problema de esta semana, ahora estoy aprovechando estos días para relajarme un poco. "No hacer nada", que es un vicio que no podre permitirme a partir de la semana que viene, y disfrutar de un merecido descanso, sobre todo mental. A ver si podemos empezar el curso con las pilas cargadas mentalmente hablando.

Además de eso, he recibido una buena noticia. Parece que finalmente este año si que tendré clases de japonés para preparar el siguiente nivel del Noken. Y aunque esta todo en el aire, si puedo adelantar un poco de los horarios. Serán solo 4 horas y media a la semana y la profesora sera distinta al profesor que me ha estado dando clase hasta ahora, como preveía, pero esperemos amoldarnos a ella, además estará bajo la supervisión del anterior, con lo que no creo que varié mucho la temática ni la mecánica del curso. Lo cierto es que me he llevado una gran alegría con esto, ya que no tendré que luchar solo contra ese todopoderoso enemigo que es el Noken 3. Esto me garantiza constancia y seguir un temario que me pueda llevar al éxito contra este peligroso y terrible enemigo final. Ayer, cuando me dieron la noticia, estaba la mar de feliz.

En otro orden de cosas, el contacto con los nipones que vienen cada año a mi ciudad parece dar sus frutos momentáneamente, y es que ayer nos juntamos mas de 50 personas en el bar de siempre. Así que parece que las quedadas y el futuro de las mismas estará asegurada por unos meses más y podremos seguir reuniéndonos con los nipones para mejorar nuestro nivel de japonés y hacer nuevas amistades mas allá de los océanos. Parece que al menos en el ámbito académico todo marcha según lo previsto, incluso mejor que lo previsto. Así que esto me hace estar de momento bastante contento. Veremos si con este espíritu positivo y esta actitud echada hacía adelante la cosa sigue mejorando en otros aspectos y de alguna manera mi futuro se aclare un poco mas. De momento, hay que seguir luchando. Este finde hay macroquedada con los japonesés, pero esa, esa es otra historia.